El artículo se concentra en demostrar la relación directa que se establece entre gobernabilidad y seguridad en América Latina, a partir del rol de las instituciones democráticas. La descripción del marco sociopolítico de la región, es la base para la definición propia de estos conceptos entendidos como consecuencias deseadas, a la vez que permite conocer las fuentes estructurales de las dificultades para conseguirlas con éxito. La premisa fundamental es que será necesario recuperar el valor de las instituciones, por que es solamente a partir de la construcción de un espacio de acción colectivo, que las interacciones sociales toman cuerpo más allá de las voluntades particulares. Las instituciones, son el nexo entre una gobernabilidad efectiva y una seguridad formal y percibida como auténtica, por que cristalizan tres elementos que permiten lograr estos resultantes: la contención social, la representatividad y la confianza.