Este trabajo analiza el tema de la secesión, estableciendo sus regularidades y planteándose como hipótesis que estas apreciaciones teóricas podrían estar adquiriendo presencia en la realidad boliviana de hoy. El autor hace una valorización cualitativa de los problemas más gravitantes del país en función de la hipótesis señalada. El trabajo apunta de identificar las fuerzas subterráneas que atentan contra la cohesión territorial hoy en América Latina y pone énfasis en el impacto del etnoindigenismo como variable explicativa. El autor recurre a ejemplos históricos de secesiones en otras partes de América Latina, y en la propia Bolivia, con la idea de establecer similitudes y diferencias con el caso de estudio. El objetivo es demostrar que ya se han configurado dinámicas centrífugas, que por ahora están repercutiendo en la estabilidad y la gobernabilidad de este espacio regional, pero que, puestas en perspectiva comparativa con la evidencia empírica, podrían tener carácter irreversible.