Bernie Aronson, Enviado Especial de los EEUU para las Conversaciones de Paz en Colombia, habló en el Centro Perry sobre sus experiencias en La Habana y Bogotá. En una conversación 1-a-1 con el profesor del Centro Perry, Pat Paterson, el Sr. Aronson habló de las negociaciones entre las FARC y el gobierno colombiano para poner fin al prolongado conflicto interno de 52 años en el país.

Aronson, un veterano diplomático asignado como facilitador de las conversaciones de paz en febrero de 2015 por el Secretario de Estado John Kerry, compartió su perspectiva desde cerca de 20 viajes a las conversaciones de paz. Según Aronson, las dos partes están trabajando en algunos asuntos delicados sobre cómo implementar asuntos de desmovilización, desarme y rendición de cuentas. En su opinión, se firmará un acuerdo formal de paz en los próximos meses.

Muchos de los comentarios del Sr. Aronson se referían a la dinámica y la estructura de las conversaciones entre los dos grupos. Sus experiencias con los esfuerzos de resolución de conflictos en El Salvador y sus años como diplomático del Departamento de Estado le enseñaron que la paciencia, la empatía y la inteligencia emocional son habilidades críticas en estas circunstancias. Hay serias dudas sobre lo que sucederá después de la firma del acuerdo de paz: juicios por los derechos humanos, una comisión de la verdad, un equipo de monitoreo de las Naciones Unidas, reintegración de ex guerrilleros en la sociedad colombiana y no hay atajos para tareas tan desafiantes. Sin embargo, Colombia tiene un gobierno muy capaz con instituciones desarrolladas y un ejército profesional que hará posible la transición de la guerra a la paz, dijo.

El Sr. Aronson también abordó el papel de Cuba y Noruega como naciones “garantes”, los gestos de remordimiento y disculpas de las FARC, la política de extradición colombiana, el impacto de los bajos precios del petróleo en los esfuerzos posteriores al conflicto y la industria de las drogas ilícitas en el país.